¿Quién no recuerda esas mañanas levantándote a las 8 e ir directamente a la tele a ver nuestras series preferidas? Esas en las que no soltábamos el mando hasta que terminaban. Esas mañanas repletas de los Looney Tunes, Winnie the Pooh, Mickey Mouse, los Pitufos, David el Gnomo, los Teletubbies, la Abeja Maya, Pokemon…y mis preferidos, Barrio Sésamo:
Esas clases de cerca y lejos, alto y bajo… La risa de Epi, que te sacaba a ti una sonrisa, a veces con algún diente de leche de menos… Esos “¡Epi, es hora de dormir, ya lo harás mañana!” que decía Blas cuando Epi no paraba de hablar en la cama…
¿Y quien no se acuerda de Elmo? ¡Si! ¡Ese que era rojo! Ese que nos enseñaba algunas cosas y nos contaba lo que le pasaba, lo que más le gustaba, que nos preguntaba y nosotros le respondíamos todos convencidos de que él nos escuchaba.
¿Y Triki? Ese monstruo azul con esos enormes ojos que se le movían hacia todos los lados y que DEVORABA las galletas a puñados mientras Epi lo miraba asombrado.
¡O Coco! Ese delgado y azul, que nos mostraba sus aventuras como superhéroe, cartero, cantante, explorador y muchas cosas más.
Los fines de semana muy tempranito lo siguen echando en la tele, y seguro que casi todos cuando haciendo zapping los vemos, mostramos una sonrisa al recordar nuestra infancia, sin preocupaciones ni responsabilidades, en las que simplemente querías sentarte en el sofá y estar horas y horas viéndolo hasta que terminara para después ir al parque a disfrutar de esos columpios, mientras nuestros padres, siguiéndonos de cerca, se ponían negros por las burradas que hacíamos.
Laura.
1 comentarios:
¡Barrio Sésamo!
Esta genial Lau.
Por supuesto a todas nos encantan Epi y Blas. :)
Merce
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